En un paso histórico para los deportes de preparatoria, Dallas ISD, junto con los Dallas Cowboys, inauguró la primera liga de fútbol bandera femenina esta primavera.
“El programa abre las puertas para que las jóvenes desarrollen habilidades de líder, confianza en sí mismas y amistades duraderas. También les da la oportunidad de competir, estar físicamente activas e incluso explorar futuras oportunidades deportivas”, dijo Paula Lewis, entrenadora en Lincoln High School and Humanities/Communications Magnet. “Ya sea jugando en el siguiente nivel o trabajando como entrenadoras, árbitras o en gestión deportiva, este deporte abrirá puertas para ellas”.
Sy’Niyah G., recién graduada de Lincoln, y Jisselle G., quien se graduó este año de Moisés E. Molina High School, son las primeras en obtener becas universitarias de fútbol bandera. Ambas estudiarán en Texas Wesleyan University.
Todas las 22 preparatorias de Dallas ISD participaron en la temporada inaugural, y el impacto de la liga en las estudiantes es evidente. El deporte es más que una nueva actividad extracurricular: es un escenario de empoderamiento y oportunidades.
“La temporada fue emocionante e impactante, y está claro que el interés en el deporte está creciendo rápidamente. Ahora que se están ofreciendo becas, aún más jóvenes están motivadas para participar”, dijo Nicole Stovall, coordinadora deportiva adjunta y entrenadora de fútbol bandera femenino en Dr. L.G. Pinkston Sr. High School. “El fútbol bandera está abriendo nuevas puertas para las deportistas mujeres, y es emocionante ver el impacto positivo que este programa ha tenido en el campo y más allá”.
Además de becas, jugar fútbol bandera da a estas jóvenes atletas una gran variedad de oportunidades, dijo Stovall.
“Les permite refinar sus habilidades atléticas, competir a un alto nivel y abrazar la disciplina, colaboración y estructura que proporcionan los deportes organizados”, dijo. “El programa ayuda a elevar la visibilidad de las mujeres en los deportes”.
El éxito de la primera temporada es prueba de que existen tanto una necesidad como un interés en el fútbol bandera, dijo Lewis.
“Empezó como una nueva aventura en que la mayoría de las chicas no sabían qué esperarse, y ahora, han aprendido mucho y se han vuelto mejores jugadoras y compañeras”, dijo.
Con miras al futuro, Lewis y Stovall están emocionadas por el próximo año.
“Como campeonas de la primera temporada, fue increíblemente gratificante ver a nuestro equipo competir a tan alto nivel”, dijo Stovall. “Es un momento emocionante para ser parte de este programa, y tengo ganas de mantener el impulso que hemos generado”.
El consejo de Lewis para las muchachas que desean jugar fútbol bandera es tener empeño.
“No es tan fácil como parece, pero si uno se esfuerza, cualquier cosa es posible”, dijo. “Crean en sí mismas y no tengan miedo de probar algo nuevo. Puede que se sorprendan con lo que pueden hacer”.