Los estudiantes del coro de Barack Obama Male Leadership Academy at A. Maceo Smith aprenden más que notas y escalas musicales: están aprendiendo a ser más confiados y a formar lazos con otros.
“El coro es como terapia de exposición”, dijo Christian R. “Es un ambiente seguro, así que la presión de cantar delante de otros se esfuma rápidamente y me ayuda a sentirme más seguro en cada aspecto de mi vida”.
Christian, quien cursa último año de preparatoria, se unió hace siete años para aprender más sobre la música. Lo que más le gusta del club son los amigos que ha hecho a lo largo del camino.
“El coro me ayudó a conocer a muchas personas diferentes de mi escuela y es un medio de conectarme con personas que no van a mi escuela”, dijo. “Es una experiencia significativa que comparten desconocidos”.
El club de canto, más que una actividad extracurricular, prepara a los estudiantes para la vida después de la preparatoria, responsabilidad que Dustin Barksdale, director del coro, toma en serio.
“Mi objetivo como educador es enseñarles a ser buenas personas. Quiero que vayan al mundo y transmitan positivismo, no odio”, dijo. “Quiero que se puedan expresar de manera articulada y sensible. La música es meramente la herramienta que usamos para que desarrollen las habilidades sociales y emocionales que necesitan para la vida”.
Estar en coro ayuda a los estudiantes a aprender habilidades como gestión de tiempo, colaboración y organización. Y obtener premios estatales en competencias de la UIL los ayuda a destacarse en sus solicitudes universitarias, dijo Barksdale.
Participar en competencias les da confianza, pero también les enseña a trabajar hacia una meta y a lidiar con la decepción, agregó.
“La vida es una rueda de altos y bajos, de momentos buenos y malos”, dijo Barksdale. “Los resultados no siempre son lo que uno quiere. Si bien en el momento puede ser desalentador, es una de las lecciones más importantes que pueden aprender en el coro”.
Más que nada, Barksdale espera que se gradúen sabiendo quienes son.
“Quiero que dejen el coro sabiendo expresar sus emociones, sabiendo trabajar con los demás y, lo más importante, con la confianza de ser quienes son”, dijo.
Es una lección que Frederick W., de último año, está aprendiendo.
“Coro me ayudó a expresar mis sentimientos y a esforzarme por las cosas que quiero”, dijo. “Al ponerme en el foco en ciertas situaciones, me he vuelto más seguro de mí mismo en la vida real”.
Frederick dijo que ha aprendido paciencia, resiliencia, disciplina y pasión, lo que dijo que lo ayudará luego de cruzar el escenario de graduación.
“Llevo cuatro años en coro y he tenido la satisfacción de tener experiencias que de otro modo no hubieran sido posibles”, dijo. “Me dio una visión de la vida que no tenía y me abrió una posibilidad profesional”.
Al rememorar su experiencia, Isaac M., quien se graduó de BOMLA en mayo de 2025, se había unido al club de canto buscando tener un espacio en el que pudiera expresarse a través de la música y ser parte de una familia. Hoy estudia Neurociencia y Biología Conductual en Emory University, y aplica lo aprendido en BOMLA a sus clases.
“En la universidad, suceden muchas cosas a la vez y a veces uno se abruma”, dijo Isaac. “Coro me enseñó a llevar todas mis responsabilidades a la vez y seguir determinado incluso cuando las cosas se ponen difíciles”.
El plazo para enviar la solicitud de admisión de 2026–2027 a escuelas que requieren una, como BOMLA, cierra el 31 de enero de 2026.
