En Cedar Crest Elementary School, el impulso cobra más fuerza en cada salón gracias a una práctica que lo hace todo posible.
El “looping”, que consiste en mantener a los estudiantes con el mismo maestro por varios años, se ha convertido en un motor importante de crecimiento en la escuela. Para la directora Stacy Ray, no solo es una estrategia, es un cambio cultural.“Esta práctica permite a los maestros conocer a sus estudiantes a fondo, seguir su progreso más de cerca y personalizar su aprendizaje de manera que aumente su confianza en sí mismos y su consistencia”, dijo Ray. “Es la conexión, año con año, lo que hace una gran diferencia”.
La diferencia se hace evidente en las clasificaciones estatales. Cedar Crest Elementary recibió una A este año, con mejoras en matemáticas, ciencias, preparación postsecundaria y en la reducción de la brecha de oportunidades. En general, el aprovechamiento estudiantil sigue subiendo de manera constante cada año.
“Estoy increíblemente orgullosa y entusiasmada por los resultados de este año en el STAAR”, dijo Ray. “En Cedar Crest alcanzamos nuestra meta y la superamos”.
Las puntuaciones de lectura de tercer grado también mostraron un crecimiento significativo bajo maestros ejemplares, mientras que los estudiantes de matemáticas de sexto grado demostraron un rendimiento excepcional. Más allá de la enseñanza de calidad, las estrategias como la fijación de metas, el análisis de los trabajos de los estudiantes y el celebrar cada avance dieron pie al impulso que mantuvo a los estudiantes confiados y activos.
Ray se empeña en continuar el ritmo y alcanzar un rendimiento aún mejor en matemáticas, lectura y ciencias, al tiempo que reduzcan más las brechas de oportunidades en todos los grupos estudiantiles.
“Cedar Crest es más que un lugar: es una comunidad con un propósito formada con amor, por familias y con un compromiso compartido hacia la excelencia”, dijo Ray. “Nosotros creemos que cada persona que pasa por nuestras puertas merece una experiencia única. Ya sea un estudiante que va a un salón o un vecino que nos acompaña durante un evento comunitario, lo saludamos con calidez, ánimo y creencia en su potencial”.