Nazira Sahial se ha empeñado en crear un entorno acogedor para su clase de kínder en Personalized Learning Academy at Highland Meadows, donde los estudiantes se pueden sentir valorados.

Al principio, Sahial consideró estudiar medicina, pero descubrió su verdadera pasión en la educación mientras trabajaba como asistente de prekínder como estudiante de pregrado en Dallas College.
“Me reencontré con aquel recuerdo de la infancia de cuando rompía hojas de mi cuaderno y hacía de maestra”, dijo Sahial. “Algo me hizo clic. Me hizo recordar lo que en verdad me emociona, y fue cuando supe que quería ser maestra”.
Sahial, quien creció en una casa multigeneracional en San Diego, es de ascendencia afgana, y pasó su infancia rodeada de familia, jugando a la escuelita con sus primos, como un presagio de su futuro.
Sahial dejó su trabajo como asistente de prekínder para completar su licenciatura en Educación por medio de TechTeach Across Texas. Al completarlo, empezó su carrera en Dallas ISD como maestra en vías de certificación.
Poco tiempo después, consiguió su primer empleo como docente en Highland Meadows, donde ha enseñado kínder por tres años.
Su salón es un entorno educativo inclusivo con centros prácticos, descansos mentales y una rutina matutina que ayuda a los estudiantes a sentirse calmos. Como nueva maestra del año escolar 2022–2023, Sahial fue reconocida como Maestra Prometedora.
“Tuve que pedir ayuda de todos para poder funcionar exitosamente en mi salón el primer año. No es una experiencia fácil la de empezar, así que cuando me dieron el reconocimiento Maestra Prometedora tan pronto, me emocioné mucho”, dijo Sahial.
Ese mismo año, Sahial se enfrentó a una situación particular: uno de sus estudiantes era ciego.
“Esa experiencia me cambió”, dijo. “Asumir la responsabilidad de ser los ojos de mi estudiante y de apoyarlo todos los días me dio mucha confianza. Aprendí lo poderosa que es la paciencia y que puedo superar cualquier cosa”.
Sahial sigue creando un entorno educativo inclusivo para sus estudiantes. Su método nace no solo de su experiencia profesional, sino también de su identidad.
“Soy de San Diego; nací allí. Si alguien me pregunta mi origen, normalmente digo que soy afgana americana, y Afganistán es un país de Asia Central”, dijo Sahial. “Mi identidad como afgana americana y mi formación en escuelas públicas me han ayudado a ser resiliente. Mi identidad siempre ha sido muy compleja”.
Sus padres fueron refugiados de Afganistán en los años ochenta. Creció en un ambiente multilingüe, pues hablaban inglés, darí y pastún, cimientos que ella considera la formaron para tener una mente abierta y empatía para con los demás.
“Espero lograr que más personas de mi comunidad sepan lo que es ser asiático-americano. La mayoría no piensa en Asia Central cuando piensan en el mes AAPI, pero nosotros somos parte de la historia también”, dijo.
De niña, su familia le inculcó aceptar a los demás y sus culturas.
Su filosofía de enseñanza es que haya autenticidad y un sentido de pertenencia en su salón. Anima a sus estudiantes a abrazar quienes son y tratarse uno a otro con empatía y comprensión.
“Al crecer en el sistema educativo, no vi a muchas personas que usaran hiyab. Así que no vi mucha representación a mi alrededor”, dijo. “La representación sigue pareciéndome escasa, pero me enorgullezco de ser quien soy y de lo que represento”.