En 1988, Conrad Hutchinson Jr., director de bandas en Grambling State University, y Richard Johnson, director principal de banda de South Oak Cliff High School, empezaron una recaudación de fondos para comprarles uniformes a los estudiantes de SOC sin darse cuenta de que estaban sembrando la semilla de lo que se convertiría en una tradición del distrito: la batalla de las bandas.
“South Oak Cliff es una escuela con centenares de historias, sobre todo cuando de la banda se trata”, dijo Le Manuel Williams Jr., director de bandas de SOC. “Uno no puede platicar de la batalla de las bandas sin mencionar a South Oak Cliff porque ellos fueron los pioneros de todo ese movimiento”.
Williams recuerda cuando compitió en la batalla de las bandas como estudiante de John Lewis Justice Academy at Oliver Wendell Holmes. En ese entonces, la escuela era una de las pocas secundarias que participaban en la competencia.
“Típicamente la temporada de fútbol americano nos opaca porque es el deporte de Texas. Una banda no ve a otra a menos que estemos en un partido”, dijo Williams. “Algunos estudiantes han formado amistades que durarán toda una vida. Es una competencia, pero les da a los estudiantes la oportunidad de crear vínculos importantes”.
Mariah H., estudiante de último año en SOC que toca el corno francés y el melófono, dice que es una competencia intensa pero amistosa.
“Fuera de la competición, somos todos amigos, pero a la hora de actuar en la batalla, nos volvemos rivales. Uno tiene que ir seguro de su estilo y habilidad musical”, dijo.
Al destacar el estilo de marcha de espectáculo tradicional al igual que el de cuerpo militar, o más bien la integración de ambos, las bandas hacen presentaciones con temática de varios géneros musicales como R&B, hiphop y pop de hoy y también los clásicos de ayer.
En general, se invita a las bandas de distritos cercanos y lejanos a la competencia. Este año, el enfoque fueron las bandas de Dallas ISD.
Carlisa Washington, coordinadora del Departamento de Artes Visuales y Escénicas, dijo que los estudiantes músicos y los equipos auxiliares y de bailarines son el corazón de la batalla de las bandas.
“Su energía, dedicación y pasión al prepararse para la competencia amistosa es la esencia de esta tradición”, dijo. “El ganador obtiene el derecho de presumir su victoria hasta el año entrante”.
Washington tiene un lazo personal con el evento, pues dirigió la banda de School for the Talented and Gifted at Yvonne A. Ewell Townview Center por 19 años como subdirectora, y luego como directora por dos más. Anteriormente, venía gente esporádicamente, pero ella ha notado que desde la pandemia han tenido un público estable.
“Siempre es una experiencia muy emocionante”, dijo Washington. “Como equipo, nos enorgullecemos de crear espectáculos innovadores y buscamos siempre llegar al siguiente nivel dando una experiencia energizante que destaque complejidades musicales, la marcha y la grandeza de principio a fin. El ambiente es vigorizador, intenso e inspirador al ver la creatividad de los participantes”.
Este año, la competencia Dallas Bands United Battle of the Bands tendrá lugar la mañana del sábado, 28 de septiembre, en John Kincaide Stadium con una presentación especial de la banda de Prairie View A&M University. Todos los beneficios se destinarán a los programas de banda de marcha de Dallas ISD.
