Como bailarina de toda la vida que en un momento debió recuperarse luego de una lesión, Riah H. entiende lo que significa volver a empezar.
“Pasé mucho tiempo sin bailar así que tuve que empezar a un nivel de principiante”, dijo. “Eso fue una gran lección para mí, y aprendí mucho. Sobresalió mucho en el camino, y tuve que volver a empezar”.
La estudiante de último año de North Dallas High School fue una de decenas de estudiantes de Dallas ISD quien pasó sus primeros días de vacaciones de verano participando en un taller de baile en W.T. White High School.
El taller de baile está disponible para todos los niveles y ofrece clases de ballet, jazz, teatro musical y baile moderno. Los participantes también aprenden a improvisar un baile y mostraron lo que habían aprendido en una actuación.
Kamila V., estudiante de octavo grado en W.H. Gaston Middle School, dijo que participar en el taller combina dos de sus cosas favoritas: bailar y estar con otra gente.
“Bailar es algo que empecé a hacer con mis amigos, y resultó que me gustaba mucho”, dijo. “Aquí, puedo socializar con mis amigos, conocer a nuevas personas y mejorar mi técnica”.
También sirve como una forma de mantenerse activo durante el verano, agregó.
“Probablemente no hubiera hecho nada más que quedarme en casa”, dijo Kamila.
Sus estilos favoritos de baile son el del jazz y el lírico, e incluso ha presentado un solo lírico.
Riah, a quien le encanta el hip-hop, recuerda que siempre le atrajo ese estilo de baile.
“Es la velocidad, la energía, los trucos y la técnica”, dijo. “Casi nadie sabe sobre la técnica del hiphop porque parece que solo estamos haciendo un montón de movimientos grandes. Pero está ahí, y es crucial”.
Camila M., estudiante de sexto grado en Jesús Moroles Expressive Arts Vanguard, descubrió su amor por el baile a los ocho años cuando se unió a un club de baile en su antigua escuela.
“Siempre he querido bailar y sentí que por fin tenía la oportunidad de hacerlo”, dijo. “Estaba muy entusiasmada”.
Camila, quien quiere asistir a Booker T. Washington High School for the Performing and Visual Arts, disfruta especialmente del jazz y otros estilos de baile contemporáneo.
“El jazz es divertido. Me hace feliz”, dijo. “A veces cuando bailo contemporáneo, resuena en mí, y me gusta ese sentimiento”.
Es el vínculo con sus demás compañeros lo que Camila se lleva de su experiencia en el taller de baile.
“Mi parte favorita del campamento es conocer gente y relacionarme con ellos sobre lo mucho que nos gusta bailar”, dijo Camila.
Como miembro del equipo de baile de North Dallas High School, el consejo que les da Riah a los bailarines más jóvenes es echarle ganas.
“No le piensen demasiado. Uno solo tiene que hacerlo. Crean en sí mismos y sigan intentándolo”, dijo Riah. “Se van a equivocar, y eso es parte de ello. Pero tienen que saber cuándo levantarse y seguir adelante”.
Camila coincide con Riah.
“Aunque sea mucho trabajo y mucho movimiento, no se rindan. Sigan adelante”, dijo.