Como asistir a la Universidad de Harvard nunca figuró entre los planes de Natalie A., imagínese lo sorprendida que estuvo cuando fue admitida a la prestigiosa institución.
“No hay límites”, dijo, reiterando las palabras de ánimo de su padre. Con vistas al futuro, Natalie reflexiona sobre las lecciones que aprendió en Bryan Adams High School Leadership Academy, aprovechando oportunidades que alguna vez creyó fuera de su alcance.
“Vaya adonde vaya, sé que llevaré conmigo las lecciones y los valores que me inculcaron en Bryan Adams High School”, dijo.
Natalie tuvo mucho éxito en Bryan Adams haciendo de todo, incluyendo clases, roles de liderazgo y actividades extracurriculares. Es miembro de la National Honor Society, National Academy Foundation, del club de ajedrez y funge como historiadora del consejo de su generación.
Agradece a sus padres, quienes no obtuvieron una educación universitaria, por inculcarle el valor del aprendizaje y la importancia de que aproveche cada oportunidad.
“Lo único que siempre esperaban de mí era que obtuviera una educación”, dijo. “Siempre se arrepintieron de no haber ido a la universidad porque no tuvieron la dirección que hoy me dan los maestros y consejeros”.
Además de sus actividades extracurriculares y su trabajo a tiempo parcial, Natalie también participó en el programa de estudios en Corea del Sur con CIEE K-Pop Immersion en Seúl. Dice que fue una experiencia transformadora y lo que la inspiró a solicitar admisión en Harvard.
”Ver la hermosa cultura de Corea del Sur despertó un interés en mí de conocer a personas de diferentes culturas”, dijo Natalie. “Tuve que ir más allá de mi entorno para vivir todo eso, así que eso es lo que tenía en mente cuando empecé a explorar universidades”.
Pese a las dudas iniciales y el temor al rechazo, encontró ánimo gracias a sus padres y maestros quienes nunca dudaron de sus habilidades y la motivaron a correr el riesgo y enviar la solicitud. Cuando llegó su carta de admisión, su emoción fue indescriptible.
Ahora, a punto de emprender camino a Harvard, Natalie está lista para estudiar Química y planea ser anestesióloga.
Su pasión por la medicina empezó en la infancia cuando fue a trabajar con su madre, quien era auxiliar médica.
Después de presenciar el evidente temor entre personas de su cultura al ir al doctor, Natalie aspira a hacer una diferencia al convertirse en médica. Considera que la representación en la atención médica reducirá la ansiedad y logrará que la comunidad latina confíe en los profesionales médicos y pida ayuda cuando sea necesario.
Natalie está ansiosa por aprovechar sus oportunidades en Harvard, aprender de diversas perspectivas y dejar una huella en el mundo.
”Espero ser un alivio para aquellos que busquen atención médica como una persona que se parece a ellos”.