Apoyarse mutuamente y allanar el camino para el éxito de los estudiantes son partes integrales de la cultura de Dallas ISD y del trabajo que los educadores hacen todos los días. Para dos bibliotecarias, este trabajo también ha sido un viaje para descubrir nuevas carreras y redescubrir su amistad.
Brenda Vargas de Louise Wolff Kahn Elementary y Yolanda Rosa de Henry B. González Personalized Learning Academy se conocieron por primera vez en enero de 2012 cuando Vargas tomó una posición de suplente a largo plazo en Kahn. Vargas dijo que Rosa “me ayudó desde el principio” y se convirtió primero en su mentora en el aula y luego en su buena amiga.
“Comencé en Dallas ISD hace 24 años”, dijo Rosa. “Yo era el joven, y estaba en un equipo con maestros veteranos. Nos enseñaron cómo trabajar juntos. Todos nos ayudamos mutuamente, y aprendí algo de todos y cada uno de ellos. Vargas, era joven y quería aprender y quería ayudar a sus estudiantes, y eso me encantó de ella. Aprendí de ella, y ella aprendió de mí”.
Enseñaron juntas en Kahn durante unos años antes de que Rosa se mudara a Edwin J. Kiest Elementary School, pero las conexiones que construyó en Kahn no se desvanecieron. Inspirada por la antigua bibliotecaria de Kahn, Nancy Cheyne, Rosa decidió seguir sus pasos y ha pasado los últimos siete años como especialista en medios bibliotecarios en Kiest y ahora en González.
Mientras Vargas y Rosa perdieron contacto durante esos años, Vargas pronto se embarcó en su propio viaje para convertirse en especialista en medios de la biblioteca, también inspirada por la colega que ella y Rosa todavía llaman “Mama Cheyne”. Vargas obtuvo su maestría y continuó trabajando en Kahn como maestra durante unos años más hasta que Cheyne se retiró en 2021 después de más de 50 años de servicio. Vargas dio un paso adelante para llenar la posición abierta.
Rosa y Vargas no tenían idea de que habían estado en caminos tan similares hasta el otoño pasado. Ambas se habían unido a la segunda cohorte del Proyecto READ para ampliar su conocimiento de investigación, exploración, aplicación y diseño de la biblioteca , y se toparon en una capacitación.
“La vi por detrás, solo por la espalda, y luego comenzó a hablar”, dijo Vargas. “Al instante pensé: ‘Sé quién es’. Tan pronto como tuvimos un descanso, me acerqué a ella, y fue como si nunca estuviéramos separadas”.
Han estado hablando desde entonces, compartiendo sus experiencias y lo que Vargas llamó las “alegrías que vienen de ser bibliotecario”. Ser especialista en medios es algo que a Vargas le encanta, pero dijo que puede ser difícil ser la única en su escuela.
Es por eso que estas amistades y conexiones continuas en todo el distrito significan tanto para Vargas como para Rosa. Como especialistas en medios bibliotecarios de Dallas ISD, dijeron que les encanta unirse y apoyarse mutuamente a través de los altibajos.
En palabras de Rosa, “Todos estamos aprendiendo juntos. Solo podemos mejorar”.
