A Abelino Leija, estudiante de décimo grado de Madison High School, su severa discapacidad visual no le ha impedido jugar al fútbol junto a sus compañeros de equipo.
Su administrador de caso, junto con su entrenador de fútbol y el personal de The Vision Team en Madison High School, lograron que Abelino obtuviera unos lentes protectores especializados que le permiten cumplir con los requisitos médicos que le impidieron formar parte del equipo de fútbol de su escuela durante su primer año de preparatoria.
A pesar de que Abelino lucha contra la distrofia macular juvenil, un problema ocular que afecta a su visión central y le impide ver lo que tiene enfrente, el joven no deja que esta enfermedad le impida cumplir su sueño de jugar deportes.
Todos los días, Abelino recorre James Madison High School con un bastón y siempre tiene un telescopio de bolsillo a la mano para poder ver las cosas que están lejos. En clase, una pantalla de CCTV le ayuda a leer la pizarra con precisión. Y aunque ver de frente es casi imposible, cuando Abelino está mirando de lado puede ver el mundo que lo rodea con claridad a través de su visión periférica.
“Todo lo que tengo al frente lo veo borroso”, dijo Abelino. “Hay muchas cosas que me resultan realmente difíciles de hacer debido a mi visión. Pero sé que, mientras siga intentándolo, lo puedo lograr “.
El fútbol es el deporte más popular al sur de la frontera, y el estado mexicano de San Luis Potosí -de donde es la familia de Abelino- no es una excepción. Su padre le enseñó a jugar cuando era pequeño. Y cuando sus primos, hermanos y amigos se reunían en fiestas familiares, el fútbol era la actividad que más unía a los niños. Desde entonces, Abelino supo que le gustaría jugar de forma competitiva cuando llegara a la preparatoria.
Encontrando un propósito
Todos los estudiantes de Dallas ISD que deseen participar en deportes en la preparatoria necesitan la autorización de un médico antes de participar. En el caso de Abelino, después de ser examinado por un médico y por un especialista de la visión, los profesionales médicos determinaron que podía jugar al fútbol solo si llevaba unos lentes protectores hechos a la medida y con prescripción óptica, lo cual superaba el presupuesto de su familia. Sin embargo, eso no impidió que Abelino participara, aunque no se le permitía jugar en los partidos.
“Vi que era realmente un apasionado del fútbol y que mostraba mucho interés y un deseo muy fuerte de jugar, así que lo inscribí y encontré la manera de incorporarlo a nuestro equipo como mánager y le di algunas responsabilidades”, dijo Jerónimo Santos, el técnico de Madison High School. “Se metió de lleno y tuvo un impacto tremendo en su persona, no sólo como joven, sino como estudiante. Vimos que sus calificaciones empezaron a subir poco después. Estaba muy entusiasmado, y a mí me entusiasmaba ver que había encontrado su propósito”.
Como mánager, Abelino apoyaba a su equipo dirigiendo los ejercicios de calentamiento y entusiasmando a sus compañeros para que entrenaran. Durante los entrenamientos, se aseguraba de que todos los balones estuvieran inflados y repartía agua a sus compañeros durante los descansos. Durante los torneos, se encargaba de empaquetar mochilas con camisetas, pantalones cortos, calcetines y espinilleras adicionales para asegurarse de que a ninguno de sus compañeros le faltara equipo.
“Ser mánager significó mucho para mí porque me apasiona el fútbol”, dijo Abelino. “Es difícil cuando tu condición se interpone en tu camino para hacer lo que quieres. Mi padre sabía que me gustaba jugar y siempre me motivó a no renunciar a mis sueños. Cuando me hice mánager, me hice amigo de todos mis compañeros y eso me motivó aún más.”
El Departamento de Servicios Especiales de Dallas ISD administra The Vision Team, formado por veinte maestros y especialistas que apoyan a los estudiantes de todo el distrito que luchan contra las deficiencias visuales y la ceguera. En Madison High School, un maestro de estudiantes con deficiencias visuales enseña los contenidos y las formas de facilitar el aprendizaje, y un especialista en movilidad de orientación enseña a los estudiantes a andar por la escuela de forma independiente.
Cumpliendo con una necesidad
Britney Cooks, especialista en orientación y movilidad asignada a Madison High School, conoció a Abelino cuando era estudiante en Dade Middle School y lleva cuatro años trabajando con él. Cuando se enteró del deseo de Abelino de jugar al fútbol y de sus dificultades económicas para obtener el equipo necesario, se encargó de solucionar esta necesidad.
“Me puse en contacto con All Blind Children in Texas, una organización sin fines de lucro que ayuda mucho a los estudiantes con discapacidades visuales”, dijo Cooks. “Les conté el caso de Abelino y que los lentes eran muy caros, y les pedí que hicieran una excepción porque él tenía muchas ganas de jugar al fútbol. Su historia les conmovió mucho y admiraron su perseverancia, y le otorgaron los fondos para pagar sus lentes.”
Joe Henry, maestro de ciencias y entrenador de béisbol en Madison High School, es el administrador del caso de Abelino. Lleva dos años trabajando con Abelino y lo ayuda asegurándose de que haga su trabajo en clase y entregue sus tareas, y con problemas que puedan surgir.
“Cuando recién llegó, era muy calmado y realmente no interactuaba con ningún otro estudiante”, dijo Henry. “Se nota mucho la diferencia en él. Ha pasado de ser introvertido a convertirse en alguien más social. Tiene amigos en todas partes y está disfrutando mucho como estudiante de décimo grado. Ahora hace las cosas de forma muy diferente y realmente se está divirtiendo y le va muy bien”.
Además de usar su equipo de protección en el campo, Abelino se pone sus lentes con regularidad, ya que le ayudan a navegar el mundo con facilidad.
“Es muy importante que los estudiantes estén en una escuela que los apoye y construya una comunidad alrededor de ellos, ya que tenemos que ayudar a muchos estudiantes y no podemos estar allí todo el tiempo”, dijo Cooks. “Estoy impresionado por cómo Madison High School tomó a Abelino bajo sus alas, y cómo Santos y Henry realmente lo ayudaron a desarrollar su seguridad y se encargaron de que tuviera todo lo que necesitaba para jugar fútbol. Estoy impresionado y honrado de trabajar aquí en James Madison High School”.Durante el año escolar 2022-2023, por primera vez Abelino se convertirá en un troyano y representará a James Madison High School en el equipo de fútbol.
“Estoy agradecido con mis entrenadores y mis maestros porque pensé que nunca podría jugar, y ellos me ayudaron a lograrlo”, dijo Abelino. “Recuerda que debes luchar por lo que quieres hacer y nunca dejes que algo pequeño te desanime a hacer lo que te gusta”.