Helena Aranda, estudiante de último año de W.T. White High School, representa lo que es ser una estudiante culta. Quería vivir según las palabras sabias que dijo su madre. “Sólo se vive una vez, así que intenta todas las actividades que quieras y tal vez un día se convierta en tu pasión”.
Helena no perdió ni un minuto en ampliar su lista de actividades extracurriculares en la preparatoria. Actualmente es presidenta de la clase del último año, vicepresidenta de la Junta Escolar de Adolescentes de Dallas ISD, presidenta de HOSA (Future Health Professionals), y capitana de las porristas del equipo junior varsity. Helena también es miembro de la Sociedad Nacional de Honor, la Sociedad de Honor de Matemáticas, la Academia NAF de Ciencias de la Salud y porrista del equipo varsity.
Como hija de una madre soltera con tres hijos que vivieron con su abuela, nunca ha dejado que los obstáculos y las dificultades de la vida la desvíen de su camino o la definan, “Mi madre es mi mejor animadora, y me gustaría ser la animadora de alguien más algún día y hacerles saber que uno puede ser más grande que las batallas y los desafíos”, dijo Helena.
Helena dice que ha hecho que sus cuatro años en la preparatoria valgan la pena aprovechando cada oportunidad. Ahora, espera seguir los pasos de su madre y convertirse en enfermera.
Sobre todas las cosas que Helena ha logrado en su vida, hay un momento que se destaca. “Hacer que mi madre esté orgullosa es mi mayor logro”, dice. “Mi madre no tuvo la oportunidad de ir a la universidad. Cuando me aceptaron en UT Austin, lloramos. Dijo que yo estaba haciendo lo que ella no pudo hacer, y que estaba cumpliendo el sueño de ella”.
Como estudiante universitaria de primera generación, Helena estudiará enfermería este otoño en la universidad de sus “sueños”, la Universidad de Texas en Austin. Ella se describe como una persona triunfadora y dice que “la confianza es definitivamente la clave en la vida diaria”.
