Cada año, los estudiantes luchan por lograr el mejor promedio académico de su generación. Por lo general, solo un estudiante recibe esta distinción prestigiosa. Sin embargo, Fátima Roque y Tri Truong, se sorprendieron al recibir la noticia de que los dos habían logrado el primer lugar, algo que no había sucedido en mucho tiempo en Dallas ISD.
Roque y Truong, de 17 años de edad, compartieron el honor durante su graduación de la School of Health Professions at Yvonne A. Ewell Townview Center.
“Nunca imaginé que seriamos dos los que recibiríamos este honor”, dijo Roque. “Fue una gran sorpresa y me alegré porque somos buenos amigos. No hay otra persona con la que me hubiera gustado compartirlo”.
Truong espera que su éxito académico le demuestre a los demás que el gran esfuerzo nunca pasa desapercibido, aun cuando se tenga que compartir el reconocimiento.
“De esta manera, no se promueve la competencia entre los estudiantes”, indicó Truong. “Solo se busca que hagan lo mejor que puedan”.
A pesar de que el camino de Roque y Truong no fue fácil, ambos descubrieron cómo utilizar los recursos que tenían y aprendieron de sus experiencias.
“Yo crecí en Vietnam, y vi todo lo malo de la vida”, dijo Truong. “Me ayudó a darme cuenta que si nunca hago nada para cambiar mi futuro, puede que me quede atrapado en ese ciclo”.
Roque admite que no siempre fue una estudiante excepcional. Recuerda cuando estaba en el último lugar de su clase en la secundaria. Aprendió a tocar el violín, lo que le ayudó en el aspecto académico, y a la música le atribuye el haber estimulado su mente de una manera diferente.
A diferencia de otros estudiantes que tienen la ventaja de poder pedirles a sus padres que les ayuden con sus tareas, Roque y Truong no podían hacer lo mismo. Los padres de Truong no hablan ni leen en inglés, mientras que los de Roque no terminaron la educación primaria.
No obstante, sus padres los apoyaron de otras maneras, y gracias a ello tuvieron lo necesario para triunfar.
LaSandra Sanders, directora de la escuela, comentó que no hay otros dos estudiantes que lo merezcan más.
“Esto les demostrará a los demás que uno no es producto de su entorno”, dijo Sanders. “Todo es posible. Lo único que se tiene que hacer es desearlo y tener a alguien en el transcurso que te anime a lograrlo”.
