“¡No lo puedo creer! ¡Recibí Legos! ¡Lo que yo quería!”
El sonido de papel navideño rompiéndose y gritos de alegría retumbó en las paredes del gimnasio de Edwin J. Kiest Elementary School el viernes cuando estudiantes abrieron regalos de sus listas de deseos. Empleados de Salesforce, una firma de consultaría empresarial, donaron los regalos y observaron sonrientes las reacciones de los estudiantes.
“La emoción que estos estudiantes tienen cuando abren sus regalos no tiene precio”, dijo el director de la escuela Kiest Elementary, Gerardo Hernandez.
La consejera de la escuela, Keich Willis, y la maestra Kaitlyn Carlstrom coordinaron el evento en la escuela.
Para los empleados de Salesforce, el evento fue tan divertido como lo fue para los estudiantes.
“Para nuestra oficina de aproximadamente 200 personas, este es uno de los mejores días del año”, dijo Eric Carlstrom de Salesforce. “Las personas que pueden dejar el trabajo por unas horas y participar hablan del evento todo el año, y es algo que esperamos con entusiasmo.”