Para Pedro Trujillo, ser un especialista urbano significa trabajar un poco más fuerte por los estudiantes, enfocándose en aquellos que tienen problemas de asistencia, comportamiento o problemas académicos.
“Quieres terminar tu día de trabajo sabiendo que hiciste un poco más, y a largo plazo eso es lo que cuenta”, dice Trujillo, especialista urbano en L.G. Pinkston High School. “Hablo con ellos después de ser referidos a mí, y trato de averiguar lo que pasa en sus vidas. Algunos estudiantes no tienen comida o ropa, y eso les puede causar estrés. También les pregunto si les gustaría recibir consejería”.
Trujillo describe su trabajo como un defensor de los estudiantes, tanto dentro de la escuela y en la comunidad. “No sólo es establecer una red y salir a la comunidad para obtener recursos para los estudiantes, también hay que crear una relación con los estudiantes y ayudarles en sus áreas de necesidad”, dijo.
Creada hace dos años, la posición de especialista urbano está disponible en las preparatorias Pinkston, James Madison, Lincoln y South Oak Cliff High, todas en la zona escolar de patrón estratégico de la iniciativa del Imagine 2020 del distrito. El objetivo de los especialistas es intervenir antes de que un estudiante tome la decisión de abandonar la escuela, ayudándole a entender que existen recursos y personas que pueden proporcionar apoyo. También visitan a la comunidad para animar a los estudiantes que han abandonado la escuela a regresar a ella.
Trujillo reconoce que su línea de trabajo no es una en la que recibe gratificación instantánea. “Yo no veo los resultados, pero dentro de cuatro años, cuando los veo caminar a través del escenario para recibir sus diplomas, y me lo agradecen, ahí es cuando tú sabes que los has ayudado”, dijo. “Es cuando sabes que has hecho una diferencia en sus vidas.”
Además de servir como un defensor y alentar a los estudiantes a permanecer en la escuela, Trujillo también coordina el centro de ayuda de Pinkston, un tipo de tienda donde en una sola parada ayuda a los estudiantes sin hogar con pueden obtener artículos como ropa, alimentos y artículos de higiene.
Mark Pierce, quien supervisa el programa de educación para estudiantes sin hogar del distrito, inició el primer centro de ayuda en North Dallas High School, para posteriormente extenderlo a las preparatorias John Leslie Patton, James Madison y Pinkston. Dijo que los especialistas urbanos desempeñan un papel importante en la prestación de servicios a los estudiantes sin hogar. “A pesar de que no se le niega a ningún estudiante, los centros de acogida ayudan a los estudiantes sin hogar a conseguir las cosas que necesitan para mejorar sus vidas”, dijo Pierce.
Los centros pueden ayudar a los estudiantes gracias a diferentes organizaciones en la comunidad, como Promise House, North Texas Food Bank y la Iglesia de la Encarnación. Trabajando juntos, él y Trujillo son capaces de ayudar a un grupo de personas que a menudo son ignoradas – los adolescentes sin hogar. “Al principio, los adolescentes no quieren identificarse ellos mismos como personas sin hogar, pero si insistimos en ofrecerles servicios, más se acercarán a recibirlos,” dijo Pierce.