El miércoles, 17 de octubre, se llevó a cabo una ceremonia en el edificio más antiguo de Dallas ISD, que se ha utilizado continuamente como plantel escolar, para celebrar su reapertura como escuela con un nuevo modelo educativo.
Sam Houston Public School abrió sus puertas en 1909, y hasta hace poco aún funcionaba como una escuela primaria tradicional. Este año, su nombre cambió a Personalized Learning Preparatory at Sam Houston, aunque sigue sirviendo los mismos grados de primaria. El modelo de enseñanza también cambio. Ahora el aprendizaje es personalizado; los estudiantes tienen en poder de explorar y dirigir sus propios estudios dentro de los parámetros del currículo.
Durante el evento, los estudiantes dieron la bienvenida, lideraron el juramento a la bandera de Estados Unidos y de Texas, y compartieron lo que el aprendizaje significa para ellos. Raymie Venable, directora de la escuela, agradeció a los invitados especiales y al Departamento de Aprendizaje Personalizado por su apoyo.
“El país entero está al tanto de lo que sucede en esta escuela porque están haciendo algo único”, dijo Miguel Solís, representante del Distrito 8. “Atrás quedaron los días cuando era suficiente enseñar un currículo tradicional de cuatro por cuatro. Ahora creemos, especialmente en esta escuela, que cada estudiante merece la oportunidad de obtener una educación especifica que se ajuste a su manera de aprender para asegurar que el sueño americano se pueda hacer realidad”.
Les dijo a los estudiantes, “no sientan presión”, aunque todos quieren ver las excelentes cosas que lograran en la escuela. “Por lo tanto, hoy que cortamos la cinta, les estamos diciendo básicamente a todos ustedes: es un nuevo comienzo, y ustedes nos liderarán hacia el futuro”.
Brian Lusk, jefe del Departamento de Iniciativas Estratégicas, dijo que al entrar a una escuela uno puede ver señales que nos indican que tipo de lugar es. Los estudiantes con los que conversó mostraron seguridad en si mismos, y además agregó, que el tipo de comunidad que se esta creando en la escuela se extenderá hacia afuera del plantel.
“Hoy, al entrar al edificio, vi salones de clases donde los estudiantes trabajaban uno a uno con tecnología y algunos otros trabajaban con el maestro”, dijo Lusk. “Eso es exactamente lo que debe ser un modelo de aprendizaje personalizado – permitirles a los estudiantes autonomía para determinar cómo aprender.”
Indicó que, en un principio, el plan era implementar este modelo en kínder hasta segundo grado, pero se está implementó hasta el quinto grado. “Eso es algo que agradezco también”.
Angie Gaylord, jefa adjunto del Departamento de Transformación e Innovación, compartió lo que aprendió de tres estudiantes de Sam Houston sobre su experiencia con el aprendizaje personalizado.
Los tres mencionaron el enfoque que se le da a sus necesidades, a su propio ritmo de aprendizaje y sus deseos al momento de decidir qué estudiar.
“A veces cambiar el modelo o transforman una escuela no es fácil”, dijo Gaylord. “Pero lo que vamos a hacer aquí será extraordinario. Los estudiantes serán responsables de su aprendizaje, tendrán voz y libertad para elegir”.
