Cuando uno entra a T.W. Browne Middle School puede ver una caja fuerte de acero, de 5 pies de alto, en el recibidor.
Puede que la caja fuerte no contenga oro, ni dinero, pero está llena de objetos de valor: cartas que los estudiantes redactaron hablando sobre sus metas futuras. La caja fuerte también contiene algunas cartas escritas por los padres, describiendo el futuro que ellos quieren para sus hijos.
Otras 11 escuelas de Dallas ISD también tienen cajas fuertes similares. Todo ello forma parte del School Time-Capsule Project (Proyecto de capsula del tiempo), organizado por Bill Betzen, un maestro jubilado de Dallas ISD que ahora trabaja como voluntario con el distrito. Betzen empezó el proyecto como una manera de ayudar a los estudiantes a pensar sobre su futuro e informarles a sus padres sobre sus aspiraciones y sueños.
Tina Baker, subdirectora del séptimo grado en Browne Middle School, dijo que la participación de los padres es una prioridad importante para la escuela este año. Agregó que el proyecto de capsula del tiempo es de gran ayuda en dicho esfuerzo.
“El proyecto ayuda a los niños y a los padres a hablar entre sí, algo sumamente importante durante los años de secundaria”, dijo Baker. “El proyecto les muestra a los estudiantes que a sus padres les sigue importando su educación. También ayuda a los estudiantes a interiorizar y pensar seriamente sobre lo que quieren para su futuro”.
Betzen empezó el proyecto en Quintanilla Middle School en 2005, cuando era maestro en dicha escuela.
Las cartas permanecerán en la caja fuerte por 10 años. Los estudiantes pueden regresar a la escuela cuando tengan 23 o 24 años de edad y recoger las cartas que escribieron en la secundaria.
Betzen ha modificado el School Time-Capsule Project a lo largo de los años para hacerlo más efectivo. Hoy, todos los estudiantes de sexto, séptimo y octavo grado se escriben cartas a sí mismos cada año.
Las escuelas participantes también les piden a los estudiantes que escriban cartas a sus padres, pidiéndoles que ellos también escriban una carta sobre sus futuras aspiraciones y sueños para sus hijos. Esto ha incrementado la participación de los padres de 30 por ciento a más de 80 por ciento en algunos salones de clases.
Betzen dijo que el Time-Capsule Project es un proyecto de código abierto que las escuelas pueden empezar por sí mismas.
“Hasta ahora hemos tenido gran éxito con este proyecto”, dijo Betzen. “¡Invito a participar a todos aquellos que estén interesados en aumentar la participación de los padres y en que los estudiantes piensen seriamente sobre su futuro!”.