El impacto es inmediato: un mosaico vibrante, de una variedad de colores arreglados en forma de arco, representando un hermoso día de primavera lleno de flores, enormes árboles y cielos azules.
Bienvenidos a Stephen C. Foster Elementary. Esta encantadora escuela ahora tiene su propio modelo, hecho a mano, que recibe a los estudiantes, maestros y visitantes. No hay forma de que pase desapercibido; el mural enmarca el área de la recepción, justo después de pasar por la entrada principal.
“El mural es motivo de orgullo y alegría para los estudiantes que lo hicieron”, dice Lauren Patton, maestra de arte en Foster Elementary. “Todos los niños del club de arte se quedaban después de clases para trabajar en él. Ellos son los que hicieron la mayor parte del trabajo. Se quedaron por 90 minutos cada día, por dos meses. Tienen un vínculo personal con el mural. Señalan algunas piezas en las que ellos mismos trabajaron”.
Se tomó un año para terminar el mural, desde su bosquejo conceptual en la mente de Patton hasta el toque final. Recibió la ayuda de muchos niños, quienes disfrutaron de romper los azulejos, formar imágenes y pegarlos en la pared.
Patton les enseñó a los niños el concepto del mosaico, el punto esencial de crear arte con azulejos. Pero lo que realmente le dio vida al mural fue la colaboración entre Patton y Artreach-Dallas, Inc. Y lo que originalmente encendió la imaginación para iniciar con el proyecto, fue la conexión de Patton con el programa Learning Partners de Big Thought.
Patton utilizó los $1,600 que Learning Partners le asignó a Foster Elementary hacia el precio final de $3,300 del mural. La escuela recaudó $1,000 por medio de una campaña en GoFundMe, y los $700 restantes a través de una recaudación tradicional de fondos.
Todas las escuelas primarias del Dallas ISD tienen una asignación de fondos que puede ser utilizada para ver detenidamente el catálogo de Learning Partners, y escoger una actividad, un viaje, o experiencia educativa que se adapte mejor a sus respectivos estudiantes. Patton tuvo la astucia y encontró la manera de motivar a toda la escuela para que los apoyaran en este proyecto que los estudiantes, maestros y el personal disfrutaría.
Al exponerlos a las artes, humanidades y ciencias, no solo reduces la disparidad en oportunidades que en forma desproporcionada afecta a estudiantes con menos recursos, sino también les enseñas a los niños habilidades y pensamiento crítico que pueden aplicar en muchos aspectos de su educación y de su vida.
Jolette Campos y Michelle Guerrero, estudiantes de 5to grado, sienten un orgullo especial porque ellas fueron una pieza fundamental en la construcción del mural y sus sonrisas lo dicen todo.
“Pude ser creativa”, dijo Jolette. “Me divertí mucho armándolo. Fue como un rompecabezas”.
Michelle agregó, “Estaba emocionada porque nos podíamos divertir, pero al mismo tiempo pudimos expresar nuestra creatividad y hacer algo por nuestra escuela”.
“Los estudiantes fueron increíbles, pero estaban impacientes por poder empezar a trabajar y ensuciarse”, dijo Gore. “Creo que lo mejor para ellos fue romper los azulejos en pedazos con el martillo. También les gustó mucho colocar cuidadosamente la pieza justo en el lugar correcto. Hicieron el mural con sus propias manos. La cooperación de la comunidad es maravillosa. Estos niños aprendieron lo que es trabajar con piezas, y después tomarlas para crear un todo”.
Esto es fundamental en Foster Elementary. La escuela es una pequeña comunidad, un lugar donde los niños se pueden expresar y trabajar en equipo para mejorar su escuela y a la larga a ellos mismos. El mural es la manifestación física de lo que se puede lograr trabajando todos juntos.