Ricardo Gonzalez ha creado una historia de éxito pese a su humilde pasado, y elije un camino distinto a sus predecesores.
Originario de una familia de León, Guanajuato, México, en donde la mayor parte de la economía depende del trabajo de los obreros que fabrican artículos de piel, zapatos y automóviles.
A pesar de su cambio de 885 millas de distancia entre León y Texas, el futbol soccer siempre estuvo presente. Empezó a jugar cuando tenía 4 años, pero hasta que conoció a su entrenador actual de North Dallas High School, Brad Namdar, entendió que sus talentos en el futbol soccer lo llevarían a alcanzar sus sueños de acudir a la universidad, y también que el aprovechamiento académico era igual de importante si quería alcanzar sus metas.
“Estoy agradecido con mi entrenador Namdar,” dijo la señora Maria Gonzales. “Él estableció estándares elevados de aprovechamiento académico para Ricardo.” Un requisito indispensable, ya que el deseo de Ricardo es el de seguir los pasos de su entrenador y jugar futbol soccer en Souther Methodist University a la vez que estudia derecho penal- disciplina que eligió porque “cree en el derecho, la justicia y ayudar a la gente.”
El mayor de cuatro hermanos, la Sra. Maria Gonzalez lo aconseja para que termine la universidad pese a su deseo de jugar futbol soccer profesionalmente, recordándole que su educación es lo que le permitirá ser un mejor proveedor para su familia y dar un buen ejemplo a sus tres hermanos menores.
Dar un buen ejemplo es una responsabilidad que Ricardo tiene en varios aspectos de su vida, desde su trabajo de verano en una compañía de electricidad, hasta su papel en el equipo de North Dallas. Como su entrenador lo describe “un jovencito sediento de oportunidades,” Namdar cree que “gracias a los recursos y apoyo de su equipo, escuela, distrito y familia, Ricardo tendrá la oportunidad de alcanzar el éxito.”
“Es dedicado,” dijo Namdar. “Trabaja arduamente en el campo tanto técnica como tácticamente, y siempre es respetuoso, poniendo el ejemplo a muchos jugadores al demostrar que a pesar de la adversidad, uno puede hacer lo que es importante para sí mismo.”
Namdar dice que lo que hace que Ricardo sobresalga es su deseo de aprender, siempre hace preguntas y “ve el juego, las situaciones y la vida desde una perspectiva más amplia.”